lunes, 16 de julio de 2012

Capítulo 6


Me desperté, y mi equipo de preparación   Adry y Hazelle   estaba esperando a que me despertara mientras me observaba. Hoy era el primer día de entrenamiento para los juegos, y vendrían a prepararme.
Lavinia entró por la puerta de la habitación con el desayuno y me lo dejó encima de la mesa que había al lado de la cama. Me gustaba que los avox pudieran relacionarse con nosotros.
-Buenos días, Plutchi -me dijo con una sonrisa antes de salir por la puerta de la habitación sin que pudiera responderle.
Desayuné un par de tostadas y un zumo de naranja, nunca me ha gustado desayunar mucho, pero me cogí una manzana y empecé a comérmela, aún en ropa interior, y... Ejem recién levantado ejem, mientras andaba hacia mis estilistas.
-¿Y qué look ha decidido Cece que voy a llevar en los entrenamientos? -les pregunté a Hazelle y Adry.
-Ya que tu poder es la electricidad, nos da una amplia gama de colores que puedas llevar -me respondió Hazelle.
-Pero Cecelia ha decidido que llevarás unos pantalones cortos azules eléctricos y una camiseta del mismo color ajustada -continuó Adry-, un color que combinará perfectamente con tus... ojos -dijo sonrojada y mirando al suelo. Adry era muchísimo más joven que Hazelle, incluso era casi de mi edad, y yo la estaba intimidando yendo tan "suelto" por la habitación. Bah, era su trabajo.
Ambas me prepararon y bajé a la zona de entrenamiento con Taylor, que estaba preciosa, como siempre. Llevaba ropa de unos colores de tonos entre marrón y verde, que recuerdan a la misma naturaleza.

Una vez en la zona de entrenamiento, se presentaron las que iban a ser nuestras entrenadoras: Lily y Glimmer.
Nos mostraron que para los entrenamientos en grupos la sala estaba dividida como siempre: armas, normas de supervivencia, etc... Pero que podíamos solicitar entrenamientos por separado si queríamos practicar nuestro poder. Evidentemente, todos los solicitamos, por lo que se decidió que dichos entrenamientos se realizarían en el piso de cada grupo, respectivamente, ya que se habilitarían dos habitaciones para ello.

Cuando acabó el entrenamiento, tuvimos que asistir a la clase impartida por Coino en la planta 13, sobre todo lo que debemos saber de estos juegos.

Una vez acabado el día fui a mi cuarto, sin hablar con nadie, y me acosté a dormir, estaba agotado.

lunes, 9 de julio de 2012

Capítulo 5

Me desperté tal como me había acostado la noche anterior: Con ropa, mirando al techo, y deseando que todo esto sólo hubiera sido un sueño. Pero no lo era. Me levanté y me dispuse a aceptar la realidad.
Cuando salí de mi habitación, vi que Cecelia estaba esperándome dando vueltas nerviosa por el salón, con Taylor sentada al lado, y en ese momento Cece me recordó mucho a Effie... Perfecto, parece que me había vuelto a quedar dormido.
-¡Por fin te has levantado, Plutarch, llevamos toda la mañana esperándote! -dijo Eff... digo, Cece.
-¿Esperándome a mí? ¿Para qué?
-Hay cosas de estos juegos de las que sólo vuestra mentora os puede informar, como vuestros poderes...
-¡¿PODERES?! -Gritamos Tay y yo a la par, extrañados.
-Ah, sí -Aclaró-. Las armas "específicas" que mencionó Helena en la cosecha funcionan como una especie de... poderes mágicos.
Ambos nos quedamos estupefactos y seguimos escuchándola.
-Ahora, voy a deciros qué poder se os ha sido asignado -dijo con dos libretas pequeñas en las manos que parecían ser una especie de manuales-. Taylor -la miró y le dió un cuaderno-, tú podrás hablar con los animales y mutos. En este manual pone todo lo que debes saber sobre tu poder.
Tay sonrió y me miró, pero yo seguía esperando impaciente a saber cuál era mi poder.
-Plutarch -me dijo, y me entregó el manual-, tú podrás utilizar la electricidad a tu antojo. Pero, como los poderes de todos los tributos, el uso de los poderes tanto ofensivos como defensivos cansa. Por lo que no podrás soltar una descarga que pueda matar una persona, ni mucho menos fundirla. Pero ese problema no lo tendrás tú, Taylor, ya que tu poder es sólo estratégico y no te serviría directamente como ataque o defensa ante otro tributo.
Analicé toda la información y la clasifiqué en mi cabeza.
Me percaté de que Taylor me seguía mirando. Esa chica me gustaba desde hace unos años, pero no sabía si ella sentía lo mismo, por lo que me sonrojé y miré fijamente a Cecelia, esperando más información.
-¡Ah, sí! Esta noche es el desfile de inauguración de los juegos y, como este año los tributos no proceden de distritos, los trajes estarán basados en el poder de cada tributo, y no en las materias primas del distrito -dice,  para meterse en una habitación y dejarnos solos en el comedor.
Ambos nos sentamos en el sofá y no nos dirigimos la palabra. ¿Me querrá? Yo me estaba muriendo de la vergüenza...
A los cinco minutos entró Cecelia otra vez en el salón.
-¿Qué hacéis aquí aún? Id a vuestros cuartos, tenemos que prepararos para esta noche -dijo Cecelia, nerviosa.
Entré a mi cuarto, donde 2 chicas me estaban esperando, era mi equipo de preparación.
-Hola, yo soy Hazelle, ¿quieres palomitas? -me dijo, ofreciéndome de una urna.
-Yo soy Adry, encantada -me dijo una chica pelirroja.
Ni dije, nada, y las miré extrañado. Me senté en el sillón que me habían preparado y preferí relajarme un poco.

Cecelia entró en le habitación con una gran bolsa en la mano. El reloj marcaba ya las 18:00, llevaba 4 horas aquí, encerrado, preparándome para el desfile. De la bolsa sacó un bonito traje blanco con toques azules y amarillos, en forma de rayos, dándole sensación de modernidad. Me vestí y me miré al espejo: estaba bien, pero no lo suficiente para llamar la atención de los patrocinadores. Entonces, Cecelia pulsó un botón que había en el forro del traje, y mis ojos se iluminaron al ver lo que sucedió.


No vi a Taylor hasta que no estuvimos en la carroza antes del desfile. Ella iba preciosa, con un vestido blanco y sencillo, sobre el cual habían una especie de ramas de helecho que se enredaban por todo su cuerpo, y varios animales pequeños distribuidos por su cuerpo: En su hombro, su mano... Estaba radiante, cosa que hizo que me maravillara.
Me fijé en cómo iban algunos de los tributos, intentando adivinar su poder...
Madge llevaba un vestido de un tono entre blanco y morado, que conseguía hipnotizarme por la tranquilidad que producía; Ally llevaba un vestido hecho de retales de telas diferentes; mi hermana, Cressida, llevaba un bonito vestido con dibujos de ojos; Fulvia iba desnuda y solo la tapaban una serie de plantas que estaban pegadas a su cuerpo; el traje de Johanna era transparente, por lo que se le veía toda la... Ejem; Boggs llevaba un traje que recordaba al hielo; Wiress llevaba muchos relojes diferentes adheridos a su cuerpo.
El desfile comenzó, y Cece volvió a pulsar el interruptor de mi traje, el cual empezó a generar electricidad que rondaba alrededor mía, y me hacía brillar.
Durante el desfile, todas las miradas estuvieron dirigidas a nosotros, cosa que me sorprendió bastante, debido a los atuendos de otros tributos...
Al volver al edificio estaba agotado, por lo que me acosté directamente en la cama, sin dirigir la palabra a nadie.

sábado, 7 de julio de 2012

La boda entre Chop y Chaff

Esto es una pausa en mi fic, en la que relataré la boda entre Chop y Chaff desde mis ojos. Mañana me seguiré con el fic. No me matéis muchoooooooooooooooo.
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Eran las 22:30 y la novia aún no había respondido a las preguntas que le había hecho por privado con anterioridad, yo me estaba poniendo nervioso, la gente estaba nerviosa. Bueno no, la gente pasaba hasta el culo, la mitad iban vestidos de calle y la otra mitad se estaba buscando ahora el vestido. 
Decidí seguir preparando mis palabras para la ceremonia, y las terminé justo a tiempo para cuando todo empezó. 

Se abrieron las puertas de la iglesia y el novio entró cogido del brazo de la madrina: La radiante Chip. El novio lucía un precioso traje blanco.
Tras ellos, entraron las damas (Erinne y Penny) y los damos (Cuelli y Frodo) de honor y tomaron asiento, seguidos de Nyra, que llevaba los anillos y las sarras. 
El novio estaba esperando al lado del altar, cuando se dibujó una silueta en la puerta de la iglesia. 
Era la novia, Chop.
Toda la iglesia la observó asombrada (Mientras seguían comiendo palomitas y helados). Iba acompañada de coino, el padrino de la boda.
La novia vestía un maravilloso vestido blanco, como era de esperar. 
Cuando la novia llegó al altar, miró a Chaff a los ojos y ambos sonrieron y me miraron, por lo que decidí comenzar la ceremonia.
-Estamos hoy aquí la familia SP reunida para celebrar la unión en santo matrimonio entre Chop y Chaff -comencé-. Creo que tanto los novios, como yo, queremos agradeceros vuestra presencia a todos los que habéis podido asistir. Y lamentar que otros no hayan podido estar hoy aquí con nosotros.
Hice una pausa. la gente seguía ignorándome, pero decidí ignorarles.
-Ahora, si todo está en orden, podemos comenzar con la ceremonia -tomé aire, y continué-. Para empezar, quisiera leer unos versículos del libro de los Corintios que creo que a los novios les gustará:
"El amor es sufrido y bondadoso. El amor no es celoso, no se vanagloria, no se hincha, no se porta indecentemente, no busca sus propios intereses, no se siente provocado. No lleva cuenta del daño. No se regocija por la injusticia, sino que se regocija con la verdad. Todas las cosas las soporta, todas las cree, todas las espera, todas las aguanta. El amor nunca falla."
-Es palabra del Señor -finalicé.
-Gloria a ti, Señor Jesús -respondió toda la iglesia. AH NO, QUE ESTABAN MUY OCUPADOS COMIENDO PALOMITAS TODOS ocya.

Hubo un silencio estrepitoso en la iglesia, todo el mundo esperaba que yo siguiera la ceremonia, pero... Me había dado limit. El caos reinó en el lugar, todos se ofrecían para suplantar mi puesto, los novios se habían puesto nerviosos, pero yo me acordé de mi segunda cuenta. Decidí cambiarla el nombre y pasarla a todos los asistentes, para poder continuar la ceremonia, y así fue. 
Una vez calmado el caos, continué con la boda.
-Y ahora, procedamos con la ceremonia de boda -hice una pausa-. Chop, ¿vienes libremente a contraer matrimonio y sin que nadie te presione?
-Sí, vengo libremente -contestó Chop.
-Chaff, ¿vienes libremente a contraer matrimonio y sin que nadie te presione?

Se creó un murmullo más alto aún en la sala, el novio no podía contestar porque no se le oía, por lo que exploté y decidí poner orden.
-ME CAGO EN LA PUTA, QUE DEJÉIS EL PUTO HELADO, LAS PALOMITAS, Y LOS NIÑOS MUERTOS Y ATENDÁIS A LA PUTA BODA -la gente se calló de repente-. Gracias. ¿Chaff?
-Sí, vengo libremente -pudo contestar al fin.
-Si alguien se opone por algún motivo a que se produzca este enlace, que hable ahora o calle para siempre -ahora es cuando se hacen las bromas de "¡Yo me opongo!" jeje.
Pero nadie se opuso. Parece que había conseguido que se callaran.
-Y ahora, los votos matrimoniales -hice otra pausa-. Chaff, ¿quieres recibir a Chop como esposa, y prometes serle fiel en las alegrías y en las penas, en la salud y en la enfermedad, y, así, amarla y respetarla todos los días de tu vida hasta que la muerte os separe?
-Sí, quiero -contestó, y media sala se derritió de amor.

-Y tú, Chop, ¿quieres recibir a Chaff como esposo, y prometes serle fiel en las alegrías y en las penas, en la salud y en la enfermedad, y, así, amarlo y respetarlo todos los días de tu vida hasta que la muerte os separe?

-Sí, quiero -dijo, y la mayoría de la gente comenzó a salir de la iglesia, aunque esto no había terminado
-El Señor, que hizo nacer entre vosotros el amor, confirme este consentimiento mutuo, que habéis manifestado ante la iglesia. Lo que Dios ha unido, que no lo separe el hombre. Yo os declaro marido y mujer. Podéis besaros -dije sonriendo, y al momento se sumergieron en un bonito y largo beso, mientras los que quedaban y los que aún estaban saliendo gritaban "Vivan los novios".

Salieron de la iglesia, y la gente empezó a tirarles palomitas, helado, galletas... De todo menos arroz. 
La novia se dispuso para lanzar el ramo, y todas las chicas se colocaron en grupo a sus espaldas. Lo lanzó, y... ¡Lo cogió Clove!
Todo aquí había terminado, pero aún quedaba la fiesta en la playa. Aunque eso ya es otra historia que contar.
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Enhorabuena a todos los que habéis conseguido leerlo hasta el final :D Ale, que os cunda @-@

viernes, 6 de julio de 2012

Capítulo 4

Nos llevaron al gran edificio en el que los tributos reciben el entrenamiento antes de los juegos. Pero este no era el mismo de siempre, el Capitolio había gastado dinero en un nuevo edificio, que parecía tener más lujos que el anterior.
El edificio tenía 14 plantas a lo alto. 12 en las que descansarían los tributos    Cada uno en la planta con su número del grupo al que se le había asignado   ; la número 13, que era un gran salón de juegos y entretenimiento para los tributos, en el que se podían relajar todos juntos; y la catorce, que era una clase para que los tributos aprendieran teoría básica sobre las novedades de estos juegos. Esto sin contar la azotea, y la planta subterránea de entrenamiento.
Yo tuve mucha suerte en el reparto por grupos, ya que me tocó con Taylor Mellark. Ambos nos montamos en el ascensor de puertas transparentes y observamos uno a uno los estilistas-representantes que habían sido asignados a cada grupo.
-Grupo uno, Cinna -dije al verle.
-Grupo dos, Jane -continuó Taylor.
-Tres, Brutus.
-Cuatro, Mags.
-Cinco, Octavia
-Seis, Chaff.
-Siete, Katniss.
-Ocho, FoxFace.
-Nueve, Blight.
-Diez, Venia
-Y once, Flaviusa -finalicé.
Por fin habíamos llegado a la planta 12, la única sin puertas transparentes    Privilegiados jeje   . Al abrirse las puertas del ascensor vimos al fin quién iba a ser nuestra estilista y representante durante los juegos, ambos esbozamos una sonrisa y nos lanzamos a abrazarla. Era nuestra tutora en el instituto: Cecelia Earhart.
Cecelia nos mostró cuáles iban a ser nuestras habitaciones, y nos presentó a los "Avox", que realmente podían hablar y relacionarse con la gente a la que sirven. Nuestros Avox para estos juegos iban a ser Lavinia y Andrew.
Yo estaba deseando ir a mi cama y acabar con este fatídico día por fin pero, al entrar en mi habitación, me encontré con que no había nada. Bueno, nada excepto una pantalla en una pared, por lo que decidí acercarme a ella. Después de investigarla un rato, descubrí que era un panel por el cual podía elegir la decoración de mi habitación, a mi gusto. Habían desde habitaciones rurales hasta habitaciones tan sumamente modernas que parecían del futuro. Seleccioné la que tenía la cama más cómoda y el ambiente más acogedor, me tumbé en la cama y me quedé mirando al techo
-Ha sido un día muy largo -dije, y después me dormí.

Organización de los tributos en grupos. (Por aquello de los estilistas y tal)

Grupo 1: Gloss y Clove
Grupo 2: Messalla y Alice
Grupo 3: Wiress y Boggs
Grupo 4: Johanna y Finnick
Grupo 5: Fulvia y Leevy
Grupo 6: Chip y Chop
Grupo 7: Gale y Sinsajo
Grupo 8: Cressida y Ally
Grupo 9: Cuellirroto y Erinne
Grupo 10: Madge y Nashvella
Grupo 11: Lemonny y Pollux
Grupo 12: Plutarch y Taylor

jueves, 5 de julio de 2012

Capítulo 3 -Parte 2- La cosecha

-Madge Undersee -dijo Helena al fin.
...
Ma... Mad....
-¡¡MADGE, NO!! -grité y salí corriendo hacia ella.
No podía ser posible... Mad... Madge, Madge Undersee, nuestra amiga, la misma que el pasado sábado había cumplido los 16 años. La misma a la que queríamos darle una sorpresa, y menuda sorpresa se ha llevado. No... No puede ser posible. ¿Cuántas posibilidades habían de que saliera su nombre en la urna? ¿Una entre mil? No, la suerte no ha estado de nuestra parte, no.
Cuando llegue a ella entre la multitud, unos agentes ya estaban llevándola hacia el escenario, por lo que me tiré al suelo y empecé a llorar.
-Madge... Madge...
La situación no podía empeorar. Bueno, sí, el nombre de Cressida aún estaba en la urna.
-Vamos, Plutarch -me dijo Taylor mientras me ayudaba a levantarme-, la cosecha sigue... 
Me reincorporé a la muchedumbre, y abracé a Taylor, como si no hubiera mañana.
-Gracias. -Le susurré.
Pero aún tenían que salir el resto de nombres de la urna, por lo que decidí no afectarme tanto por los que vendrían:
Gloss Hadley
Fulvia Cardew
Nashvella
Sinsajo
Gale Hawthorne
Wiress
Lemonny Morrowson
Clove Kentwell
Erinne Earhart
Messalla Geller
Alice Geller
Chip
Chop
Cuellirroto
Boggs
Pollux
Finnick Odair
Johanna Mason
Leevy Merrill

Ya iban 21 tributos seleccionados, y hasta ahora nada demasiado importante, pero aún quedan tres tributos por elegir, y a mí me siguen quedando cuatro personas importantes en mi vida a las que podrían seleccionar, incluyéndome a mí (Ego powah).
-Esto se está haciendo demasiado aburrido, ¿qué tal si saco los cuatro últimos juntos? -propuso Helena, sin esperar respuesta alguna, ya que lo pensaba hacer de todas formas.
Bien, más dolos acumulado si salen nuestros nombres, aunque claro, hay menos posibilidades de que salgamos justo los 4 ahora, y mas juntos, porq...
-¡Cressida Pevensie, Plutarch Heavensbee, Ally Maxwell, y Taylor Mellark!
Su voz retumbó en mi cabeza, y seguirá retumbando hasta que me muera.
Me quedé en estado de shock, no era posible, nosotros...
Unos agentes nos cogieron a los cuatro y nos llevaron hasta el escenario. Desde allí pude ver a todo el mundo: Podía ver caras de alegría porque se habían librado, pena por quiénes eran los elegidos, e incluso euforia por estar deseando vernos morir. Esto último me pareció espeluznante.

-¡QUE COMIENCEN LOS SEPTUAGÉSIMO SÉPTIMOS JUEGOS DEL HAMBRE! -gritó Helena. Otra frase que se iba a quedar retumbando en mi cabeza.


Capítulo 3 -Parte 1- La cosecha

Los días se habían vuelto más pesados desde que nos dieron la noticia de que el instituto tenía que hacer unos Juegos... Hasta que llegó la cosecha.
El día de la cosecha, la mayoría de las clases del instituto estábamos reunidos en el patio, esperando a que salgan unos elegidos. Una gran limusina rosa llego al colegio, y de ella salió la radiante... ¡¿Helena Strasser?! Debe de haber un error, la que se encarga de las cosechas SIEMPRE ha sido Effie Trinket. Ha debido ocurrirle algo.
-¡Hola, alumnos del prestigioso instituto Panem's High School! -comenzó con su discurso- Es una verdadera pena que este instituto haya sido el seleccionado para los Juegos del Hambre... Se ve que la suerte no ha estado de vuestra parte. -Se ríe nerviosa, pero es la única que lo hace, las personas a las que está a punto de darles la noticia de su muerte no se ríen de este tipo de bromas.- Bien, voy a explicaros unas cuantas cosillas...
¡¿Explicarnos?! Sabemos perfectamente cómo funciona esto: "Tú, tú y tú, pelearos hasta morir y al último que quede le damos fama, dinero y prestigio. Tenéis 60 segundos para pensar cómo lo vais a hacer una vez hayáis visto la arena. Empezad.""
-Debido a que estos juegos se van a celebrar para ciudadanos del capitolio, estos juegos tendrán unas ciertas... Ventajas. Digamos que los tributos seréis... Tributos VIP, por lo que el capitolio gastará mucho más dinero en estos juegos. -Dijo, y al momento todo el patio se quedó estupefacto. ¿Ventajas? Al fin y al cabo sólo quedaría uno, ¿no? ¿Qué más dará que tengamos o no ventajas durante la batalla?- Bien, las armas de cada tributo estarán diseñadas ESPECIALMENTE para el aspecto de cada tributo, e incorporadas en sus trajes, respectivamente. Por lo tanto, todos los objetos que se encuentren en la Cornucopia estarán basados en alimentos, bebidas, y materiales de supervivencia. Y no sólo esto son novedades, ya que además de los mutos, también habrá otro tipo de mutos con... características especiales que obedecerán al primer tributo que los haya sacado de su caja. Estas cajas estarán escondidas por toda la arena y serán de un tamaño aproximado para que quepan en la palma de una mano.
Tenía que estar bromeando.
-Parece que estos juegos van a estar... interesantes -dije, de manera que sólo yo pudiera oirme.
-Dicho esto, comencemos con la cosecha. Se seleccionarán 24 alumnos de sexo y edad indeterminados. El resto será como todos los juegos.
Unos cuantos profesores, entre los que pude distinguir a Blight, Cecelia, Caesar y Claudius, trajeron una urna gigantesca en la que, por lo visto, se encontraban los nombres de todos los alumnos del instituto.
Este instituto tenía la peculiaridad de no aceptar a dos alumnos con el mismo nombre, cosa que facilitaría las cosas en la cosecha.
Helena sacó el primer nombre de la urna y se aclaró la voz.